Seguramente
en algún momento habrás visto que después del apareamiento, los perros suelen
“quedarse pegados”.
Luego
de que el macho se aparee con la hembra este gira sobre su espalda y queda en
posición contraria a esta quedo ambos unidos por sus genitales. Es a esto lo
que le llamamos “quedarse pegados”, pero en realidad lo que sucede es que en la
porción media del pene del perro, existe un bulbo que aumenta su tamaño en el
momento del apareamiento, y hasta que este no vuelva a su estado normal, no
podrá salir de la hembra.
El
tiempo en que los perros quedan es esta posición puede variar, pero
generalmente dura entre 15 y 30 minutos.
¿Podrá
algo así sucederle a los humanos?
Los
Humanos también podemos quedarnos pegados y este raro fenómeno se le
denomina Penis Captivus, se produce
cuando el pene de un hombre queda "atrapado" en la vagina de una
mujer. Esto es extremadamente raro en humanos ya que más común en algunos
animales) y por lo general dura sólo unos pocos segundos pero abecés tarda minutos y en otras ocaciones se ha requerido
intervención medica para separar a los individuos. Se oye increíble Pero puede
suceder.
Se
cree que este fenómeno puede ser causado por las contracciones de los músculos
de una mujer durante el orgasmo. La vagina está forrada con crestas musculares
y cuando algunas mujeres llegan a el orgasmo su vagina se contrae por otro lado su contraparte el pene que está
dentro de la vagina se va hinchando gradualmente debido a la cantidad de sangre
que queda acumulada por la presión, lo que presumiblemente puede hacer que se
sujeten.
Al
final, los músculos vaginales se relajan, el pene se descongestiona de sangre y
el hombre puede retirarse.
