Por:Emilio Yang
Desde las últimas décadas del siglo XX la humanidad comenzó a tomar conciencia de los problemas ambientales, económicos y de sustentabilidad que implicaban continuar basando todo el consumo energético mundial principalmente en la explotación de los combustibles fósiles.
Desde las últimas décadas del siglo XX la humanidad comenzó a tomar conciencia de los problemas ambientales, económicos y de sustentabilidad que implicaban continuar basando todo el consumo energético mundial principalmente en la explotación de los combustibles fósiles.
A partir de entonces hemos buscado fuentes de energía alternativa que
puedan suplir a las fuentes energéticas
actuales, ya sea por su menor efecto contaminante, o fundamentalmente por su
posibilidad de renovación.
Hoy día tenemos distintos tipos de energías
alternativas, pero les vamos a
hablar de una de ellas que es muy común y a la vez muy desaprovechada esta es la
energía que utilizamos al caminar la cual se puede aprovechar con la
piezoelectricidad.
Piezoelectricidad. Es Una lámina artificial
capaz de producir pequeñas cantidades de electricidad cuando es sometida a
ciertas tensiones estructurales, como por ejemplo al ser presionada. Así, el
movimiento de caminar puede proporcionar suficiente electricidad para energizar
un teléfono móvil, o un dispositivo implantado en el cuerpo como por ejemplo un
marcapasos.
Se dice que, en promedio, una persona puede dar
más de 200 millones de pasos durante toda su vida.
¿Qué sucedería si todos aportáramos la fuerza
de su caminar?
Varias empresas en el mundo están trabajando en
las llamadas baldosas verdes o losas
piezoeléctricas.
Cada vez que alguien camina sobre las losas Piezoeléctricas, estas obtienen
energía renovable de cada pisada. La tecnología convierte la energía cinética
en electricidad que puede ser acumulada y usada en distintas aplicaciones de
manera inmediata, como en la iluminación peatonal, la señalización de rutas y
publicidad, o ser simplemente almacenada en una batería.
Esta tecnología fue Observada por primera vez
por Pierre y Jacques Curie en 1881, mientras se dedicaban al estudio de la
compresión del cuarzo, la piezoelectricidad es un fenómeno que presentan
ciertos cristales al ser sometidos a tensiones mecánicas.
Pese a que, según los cálculos, cada paso sobre
las losas solamente genera entre 5 y 8 julios de energía –dependiendo del peso
de la persona–, cuando se utiliza en vías muy transitadas, estaciones de metro,
buses o discotecas, el verdadero potencial de este sistema sale a relucir.
Si cada paso que se da en el mundo se
transformase en energía, en un día podríamos iluminar 25.000 hogares durante
todo un año.
Las losas verdes están diseñadas para
comprimirse cinco milímetros cada vez que alguien las pisa. Cada paso sólo
puede producir suficiente energía como para mantener encendida una lámpara de
calle LED por treinta segundos. Sin embargo, ubicadas en un lugar de mucho
tránsito como un centro comercial, se aprovecha cada mínima contribución de un
gran número de personas.
Esta tecnología fue usada en los juegos
olímpicos de Londres, donde las personas circulaban sin saber que estaban
produciendo energía.
Este invento no solo se limitaría a la energía
producidas por el caminar de las personas, también por el desplazamiento
vehículos permitiendo acumular la
energía cinética que generan en sus desplazamientos.
Gimnasio al aire libre que generan energía,
Estos
generan entre 50 y 400 bt de energía, el primer gimnasio se llama de
Grimm geard esta ubicado en gran Bretaña, las personas pueden ir a ejercitarse
gratuitamente.